La Sociedad Teosófica es
una organización espiritual mundial, que aspira a despertar la sabiduría
y conocimiento de los misterios del universo y del ser humano. Según su
cofundadora, madame Helena P. Blavatsky (HPB), es «una
sociedad para la búsqueda de la sabiduría divina, sabiduría oculta o
espiritual».
Fue así como Helena Blavatsky,
Henry Olcott,
William Judge
y otros, fundaron la Sociedad Teosófica en la ciudad de Nueva York
el 17 de noviembre de 1875. Su objetivo primario
fue el estudio y explicación del ocultismo
oriental y las religiones comparadas, programa que estaría
enmarcado en un objetivo fundamental que, sería el de fomentar la relación
fraternal de toda la humanidad. La enseñanza básica de la Sociedad consiste en
que todas las religiones tienen una "verdad en común" que se
encuentra en la esencia de cada una de ellas.
En octubre de 1874, H.P.B conoció al
coronel Henry Olcott, así como a William Quan Judge,
un joven abogado
irlandés
en Nueva York.
La fundación de la Sociedad Teosófica se produjo el 7 de septiembre
de 1875,
con la participación de dieciséis teósofos, Helena Blavatsky, Henry Steel
Olcott, William Quan Judge, Charles Sotheram, Dr. Charles E. Simmons,
W.L. Alden, G.H. Felt, J. Hyslop, D.E. de Lara. C.C. Massey, E.D. Monachesi,
Henry J. Newton, H.M. Stevens, Jonh Storer Cobb, Dr. Britten, y su esposa. Sus
nombres constan en las actas respectivas.
El discurso inaugural del
Presidente fundador, Cnel. Olcott, fue pronunciado el 17 de Noviembre de 1875,
fecha oficial de la fundación de la Sociedad. Comenzó por una declaración generalizada de
objetivos, los que pronto fueron más específicamente expresados, hasta llegar a
los conocidos y actuales Tres Objetivos de la Sociedad Teosófica.
CONSTITUCION DE LA SOCIEDAD TEOSOFICA EN CHILE
En la ciudad de Valparaíso, República de Chile, a las tres de la tarde del
veintiséis de octubre de mil novecientos diez y nueve y siendo Presidente
Internacional The Theosophical Society la Señora Annie Besant y Agente
Presidencial en Sud América el Señor José Melián, autorizados debidamente por
esa Agencia e invitados por el Dr. Eugenio Morisot, se efectúa la Constitución
de la Sección Chilena de la Sociedad Teosófica, reunidos en el local de la
Logia “Lob Nor”, calle Blanco Nº 1333, los delegados de las Logias, con plenos
y regulares poderes, que a continuación se indican
Don Domingo Llanos, por la Logia “Leadbeater”
de la ST de Talcahuano; don Walter N. Day, por la Logia “Van – Hook”
de Concepción; don Ismael Valdés Alfonso, por la Rama “Arundhati” de
Santiago; don Armando Hamel, por la Logia “Númen” de Iquique; don
Eugenio Morisot, por la Logia “Destellos” de Antofagasta; don Manuel
Reyes C., por la Logia “Fraternidad”, de Valparaíso; y don Antonio
Carmona, por la Logia “Lob Nor” de Valparaíso y doña Juana A. de
Cumplido por la Logia “Ana Huguet” de Santiago, o sea un total de
ocho delegados representantes, que exhibieron todos en perfecto orden, el poder
que los faculta para representar sus respectivas Logias.
Aceptada por unanimidad la idea
de fundar la Sección Chilena de la S. T., se procedió a su Constitución,
procediéndose luego a la elección del Secretario General que regiría a la nueva
Sección.
Los Objetivos de la Sociedad Teosófica:
Formar un núcleo de la fraternidad universal de la humanidad, sin distinción
de raza, credo, sexo, casta o color.
Fomentar el estudio comparativo de religión, filosofía y ciencia.
Investigar las leyes inexplicadas de la naturaleza y los poderes latentes
en el hombre.
Aunque la palabra Teosofía no se menciona en estos objetivos, su estudio
está implícito en los tres. La Sociedad ofrece las enseñanzas de la Teosofía en
su antigua y moderna expresión, la que los miembros están en libertad de
aceptar, rechazar o interpretar de acuerdo a su propia comprensión. La libertad
de pensamiento y expresión es objeto de la mayor importancia en la Sociedad.
La SOCIEDAD TEOSÓFICA está compuesta por estudiantes que pertenecen o no a
cualquiera de las religiones existentes en el mundo. Están unidos por su
aprobación a los objetivos de la Sociedad, por su deseo de deponer los
antagonismos religiosos y congregar a los hombres de buena voluntad,
cualesquiera que sean sus opiniones religiosas, y por su deseo de estudiar las
verdades de las religiones y participar a los demás estudiantes los resultados
de sus estudios. El vínculo que los une no es la profesión de una fe común,
sino la común investigación y aspiración por la verdad. Sostienen que la Verdad
debe buscarse mediante el estudio, la reflexión, la pureza de vida y la
devoción a elevados ideales. Consideran que el precio de la Verdad debe ser el
resultado del esfuerzo para obtener y no un dogma impuesto por autoridad.
Consideran que la fe debería ser el resultado del estudio o intuición interior
y no su antecedente, que debe descansar sobre el conocimiento y no sobre la
aseveración. Extiende su tolerancia hacia todos, aun a los intolerantes, no
como privilegio que se abrogan, sino como deber que cumplen, esforzándose por
disipar la ignorancia más bien que condenarla. En cada religión ven una
expresión de la Sabiduría Divina, prefiriendo su estudio a su condenación y su
práctica a su proselitismo. Su consigna es la Paz; su aspiración, la Verdad.
Libertad de Pensamiento
En razón de que la Sociedad Teosófica se ha esparcido ampliamente por
todo el mundo, y cuenta en su seno con miembros de todas las religiones que no
renuncian a los dogmas peculiares, enseñanzas y creencias de sus respectivas
fées, se ha considerado conveniente recalcar que no hay ninguna doctrina u
opinión, enseñada o sostenida por quienquiera, que sea en algún modo
obligatoria para cualquier miembro de la Sociedad, ninguna que cualquier
miembro no esté en libertad de aceptar o rechazar. La aceptación de sus tres
Objetos es la única condición para hacerse miembro. Ningún instructor o
escritor, de H.P. Blavatsky para abajo, tiene ninguna autoridad para imponer
sus enseñanzas u opiniones a los miembros. Todo miembro tiene igualmente el
derecho de seguir cualquier escuela de pensamiento, pero no tiene ningún
derecho para forzar a nadie en la escogencia. Ni un candidato para cualquier
cargo, ni ningún elector, puede ser declarado inelegible para ejercer o para
votar debido a cualquier opinión que sostenga, o porque sea miembro de
cualquier escuela de pensamiento. Las opiniones o creencias ni confieren
privilegios ni imponen castigos.
Los miembros del Consejo Directivo piden encarecidamente a todo miembro de
la Sociedad Teosófica, que sustente, defienda y actúe sobre la base de estos
principios fundamentales de la Sociedad, y también ejerza con energía su
derecho de libertad de pensamiento y de expresión, dentro de los límites de
cortesía y consideración hacia los demás.
La Teosofía es el cuerpo de verdades que constituye la base de todas las
religiones, y que no puede pretenderse que sea posesión exclusiva de ninguna de
ellas. Ella restaura al mundo la Ciencia del Espíritu, enseñándole al hombre a
conocer al Espíritu como a sí mismo y a la mente y al cuerpo como sus
servidores. La Teosofía ilumina las escrituras y las doctrinas de las
religiones revelando su significación oculta, justificándolas ante la razón,
como siempre se han justificado ante los ojos de la intuición. La Teosofía pone
a la muerte en el lugar que le corresponde, como un incidente recurrente en una
vida sin fin, abriendo la puerta a una existencia mas plena y más radiante.
El Directorio actual de la Sociedad Teosófica en Chile para el periodo
2013-2014:
Presidente: César Ortega.
Vice-Presidente: Maximiliano Aguilera.
Secretario: Victor Aguayo.
Tesorera: Blanca Gonzalez.
Directora: Margarita Gutierrez.
Directora: Cecilia Alvarez.
Director: Domingo Espinoza.